e s q u i z o f r e n i a

Qué responderías si te dijese al oído, que nada de esto fue real, que todo fue producto de nuestra, tú imaginación, que todo lo que ha sucedido fue creado por tu esquizofrénica y jugosa mente. Las duchas, el digital tacto frente al botón para darle vida a la música, la cena que hemos compartido.
Y cuando no estaba, cuando caminabas, cuando olías los aromas de las flores callejeras con tu piel, toda tu perspectiva, renacentista, todos tus “alrededor”, tus maestros, tu madre, el agua que has bebido, e incluso aquella vez que sobre el inodoro te preguntabas si existías, mirándote el reflejo en la cerámica y golpeando tus dedos, porque creías que sentir dolor era síntoma de existencia.
Duermes.
Eres toda tu imaginación.